En esta página podrás encontrar nuestros informes de gestión anuales.
2022
a vinculación de la Fundación con nuevas redes de trabajo ha posibilitado la apertura de otras alternativas que incorporan herramientas tecnológicas para la documentación, análisis, presentación y divulgación del patrimonio en equipos interdisciplinarios con iniciativas sociales de largo aliento. La pandemia transformó de manera significativa las dinámicas de trabajo y las perspectivas de solución a diferentes problemáticas que se presentan en los diversos contextos socioculturales del país.
En este sentido, destacó el espacio de museografía virtual consolidado por la Fundación en conjunto con la Universidad del Magdalena y su Semillero de Arqueología, además de la Corporación Cultural Marabuntas. Dicho espacio, que actualmente está soportado en la web de la Fundación (https://museo.funpamix.org/) se constituye en un catálogo interactivo que sintetiza el conocimiento sobre diversas culturas del Caribe colombiano.
Por otro lado, la Fundación continúo con su trabajo de acompañamiento a Las Rocas en su proceso de defensa al derecho a la vivienda digna, el cual se ha visto traumatizado por las inercias burocráticas y la incertidumbre de implementar una u otra estrategia jurídica que de vía a la terminación del proceso de edificación de sus viviendas. En el caso de El Castillo, aunque las petroleras (como actores con importantes intereses para la implementación de proyectos extractivos) han cedido en sus perspectivas de intervención, la búsqueda de alternativas para adelantar esta fase de diagnóstico que establezca el potencial arqueológico y patrimonial por la defensa del territorio es una tarea que no cesa, y menos con la vinculación de estudiantes de la Universidad del Magdalena científica y socialmente comprometidos desde 2001 con las primeras jornadas de trabajo en la vereda El Encanto.
Finalmente, con la perspectiva de adelantar nuevos espacios de formación e investigación para la difusión de conocimientos interdisciplinarios que aporten al estudio y protección del patrimonio natural y cultural nacional, quiero agradecer a todo el equipo y colaboradores en el desarrollo de las iniciativas propuestas para este 2022. Los avances realizados hasta ahora y la consolidación de redes de trabajo nos permitirán llevar avante nuestro objetivo social y científico para la protección y conocimiento de la diversidad socionatural del país.
2021
Luego de participar de la reactivación que ha traído el proceso de vacunación, impulsado por el gobierno nacional, para enfrentar la crisis generada por la pandemia del Covid -19, para la fundación este año fue el de pensarnos cómo retomar la presencialidad sin olvidar que aun estábamos en medio de pandemia.
Con este objetivo mantuvimos nuestras fuerzas en semipresencialidad para continuar nuestros proyectos en El Castillo, Meta, y en Sogamoso, Boyacá. Hicimos lo posible por mantener la mayoría de reuniones de forma virtual, retomando algunas visitas a campo presencialmente.
También aprovechamos este año para fortalecer nuestro laboratorio digital con la adquisición de un dron y un sensor LIDAR, pero aun más importante con el inicio de un proceso de investigación interna aplicada para el desarrollo de software que permita obtener geopocisionamiento en tiempo real para este sensor. Aunque no hemos finalizado este proceso si dimos el gran paso de iniciarlo.
Finalmente, incursionamos en el área de la capacitación profesional, con el lanzamiento de nuestro curso ”SIG: UN ENFOQUE ARQUEOLÓGICO’. En cuanto a nuestra organización interna este año fue uno de cambios, ya que se retiró una de las socias fundadora Maryam Hernandes pero a su vez ingresó a la fundación Diego Guerrero. Además, atravesamos este momento de cambios modificando también nuestros estatutos, con el fin de reflejar aun más la visión que tenemos para la fundación.
De nuevo quiero quiero agradecer a todo el equipo de la fundación y a las personas que nos colaboraron en el desarrollo de las iniciativas planteadas en el 2021. Hemos logrado colectivamente seguir adelante a pesar de los duros retos que vivimos en la pandemia. Seguiremos buscando espacios para poner en diálogo a la arqueología con las comunidades.
2020
La crisis generada por la pandemia del Covid -19 genero un impacto sustancial en la población del país, pero especialmente en las personas vulnerables, como fundación no fuimos exentos a dicho impacto, a la suspensión del proyecto de Arqueología Comunitaria en el Castillo-Meta, fue una de las situaciones que tuvimos que afrontar.
Ha pesar de este panorama también fue una oportunidad para abrir nuevos espacios de colaboración, logramos ayudar a mas de 50 estudiantes de bajos recursos del programa de Antropología de la Universidad del Magdalena, Adicionalmente creamos espacios de diálogo para fortalecer la iniciativa del museo comunitario en Taganga.
Desde la Fundación Patrimonio Mixto, asumimos el reto de crear espacios de ayuda para la población universitaria en Santa Marta, logramos adaptarnos de manera rápida a las necesidades que planteo la pandemia. Logramos llegar a las personas a pesar de las dificultades asociadas con la interacción.
La situación vivida nos llevó a pensar en la necesidad de visibilizarnos y fortalecer nuestra imagen, es por esta razón que trabajamos en la mejora de nuestra página web y de nuestros canales de comunicación.
Hoy quiero agradecer a todo el equipo de la fundación y a las personas que nos colaboraron en el desarrollo de las iniciativas planteadas en el 2020. Confió que la situación vivida en ele 2020 nos permitirá fortalecer los espacios de colaboración y el desarrollo de los proyectos de arqueología comunitaria sobre los cuales trabajamos.